Vamos a iniciar esta crónica a modo de
reflexión. Que un festival que a juzgar por el número y calidad de las bandas
(cinco nada menos), y cuya recaudación íntegra esté destinada a apoyar la
Asociación contra la Esclerosis Múltiple (AGDEM) no logre reunir a más de 60
(contando con amistades de los propios grupos) personas en una sala, es cuanto
menos curioso. Hace años sin internet había excusa, pero ¿ahora?. Semanas antes
la cosa prometía; en las redes sociales nos regocijamos con el “allí nos
vemos”, vamos de mega metaleros “true” con nuestras camisetas de grupitos, y
lloramos porque no hay conciertos, pero a la hora de la verdad, lo cierto es
que en Granada sobran metaleros de bar y falta apoyo real a las bandas, sobre
todo tratándose de iniciativas tan importantes como esta. A las 9:30 conté 9
personas en la puerta, así que esperaba que ocurriera lo que con los mexicanos
Disgorge, concierto cancelado y a Pedro Antonio (la cuna del metal). Por suerte
la cosa se fue animando pocas horas después…
Los primeros en tocar fueron los granadinos KHILLIUM,
banda que en breve editarán su primer disco “Time Lapse”. Me sorprendieron
gratamente ya que recuperan nuevamente el sonido Göteborg que estuvo tan
de moda a principios de 2000 con bandas como Source, In Flames o The Wake, y a
pesar de ser muy jóvenes, hicieron gala de una buena técnica y excelente
ejecución, con dos vocalistas alternando registros limpios y guturales. Los
temas estaban bastante currados, siguiendo una línea muy melódica en ciertos
pasajes y solos, pero en general me atrajo mucho su agresividad, pues caldearon
bien el ambiente. Lo único malo es que su set solo duró media hora, algo que se
repetiría a lo largo del festival en el que las pausas entre cada banda duraron
más que las actuaciones.
Poco después llegó el turno de ERASE. Ya
hemos hablado de este cuarteto en repetidas ocasiones, así que me remito a lo
dicho en su actuación junto a Abductum. Aprovecharon para presentar su trabajo
“Cosmocide” y por supuesto no defraudaron en escena. A pesar de que me pongan a
parir en face jeje, la banda de Fran sigue pareciéndome Death Thrash, si bien
con un ingrediente Behemoth o Deathchain aquí y allá, pero con la suficiente personalidad
y agresividad para tenerlos en cuenta. Por cierto, esta vez su bajista fue
sustituido por Raúl Mechón (ex-Kubla Khan, ex-Crube, Amo-k-fre).
Respecto a los veteranos BORRIQUEROS, los
hermanos Molina no lograron conectar del todo con el público, no porque sean
una mala banda, de hecho su Rock urbano y calimochero con esta a la altura de
cualquier banda de moda, pero el contraste estilístico era notable. Canciones
cañeras, castizas y melódicas, perfectas de cara a compartir escenario con grupos
como Extremoduro o Boikot.
Tras el descanso IN YOUR FACE salieron a
la palestra. Si habéis escuchado la demo que editaron en 2010, olvidarla,
porque la dejaron a la altura del betún. Creo que pocas bandas granadinas han
dado una muestra de evolución tan importante en tan poco tiempo, y es que el
Metalcore de los de Dúrcal se ha vuelto infinitamente más pegadizo y potente, y
los nuevos temas están a años luz de su “viejo” material. Era la primera vez
que los veía encima de un escenario, y tanto la puesta en escena de la banda
(salvo por los brazos abiertos de su vocalista al modo Mitch Lucker que no
llegué a entender), como las sacudidas y espasmos de de su guitarra y bajista
al modo The Dilliguer Escape Plan eran geniales. 20 minutos que pasaron en un
abrir y cerrar de ojos. En cualquier caso, entran a grabar su primer disco
completo en navidad, y tocaran el 15 de octubre en Planta baja junto a Dawn Of
The Maya. Si no eres un simple metalero de bar, acércate; merecen la pena.
Se notó la prisa por terminar, y SNIPER
ALLEY arremetió con su Rock n´Roll setentero a mil revoluciones por segundo.
No había tiempo para presentaciones, un “gracias y go!” entre cada corte y como
si de unos Ramones se tratase el poderoso y contundente trío no paró de sacudir
acordes durante 30 minutos. Mete en una coctelera a Spiritual Beggars, Led
Zeppelin, Motorhead y Jimi Hendrix a toda pastilla y tendrás una idea acertada
de su esencia. Una pasada, y una excelente forma de terminar…
En resumen, lo que en principio fue vergonzoso
en cuanto a asistencia, pasó a ser un bolo para recordar. Quisiera que para la
próxima se tenga más en cuenta la entrega de las bandas, y por supuesto las
molestias que se toman los organizadores para conseguir dar forma a eventos (solidarios)
como éste. Menos camisetas “megachulis”, y más asistencia a estos actos!!
JM.Salas
0 comentarios: